Lecturas religiosas y lectores libertinos

Autor(es): José Abel Ramos

Resumen: Como sabemos, sobre todo a partir de mediados del siglo XVIII, las corrientes del pensamiento filosófico y revolucionario que circulaban a través de los libros inquietaron sobremanera a las autoridades de España y sus dominios. Esto hizo que el control de las lecturas, si bien había existido desde principios del siglo XVI, se volviera más estricto. ¿cuáles eran las lecturas nocivas? lQuiénes sus lectores? Cómo se procedía con ellos? A continuación se intentará dar respuesta a esas preguntas, con base en expedientes que bajo el rubro “Libros prohibidos” se encuentran en el ramo Inquisición del Archivo General de la Nación. Debemos aclarar, sin embargo, que no todos los individuos que se mencionan: autores de libros, impresores, vendedores, poseedores o lectores eran delincuentes a los ojos de la Inquisición. Desgraciadamente no podemos analizar aquí a cada uno de ellos para saber, por ejemplo, la relación entre los escritos y la gravedad del delito. Es decir: lera más grave escribir, imprimir, transmitir, poseer o leer un libro prohibido? Pero podemos aventurarnos en estas cuestiones a través del análisis de algunos casos relacionados con lectores, ya que, finalmente, la prohibición de la lectura era el objetivo principal de la reglamentación de la censura que las autoridades emitieron durante el periodo virreina!.

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